El vendedor de globos de 78 años, Carl Fredricksen, lleva a cabo el sueño de su vida al enganchar miles de globos a su casa y salir volando rumbo a…
Para alimentar la ciudad, los monstruos tienen que asustar a los niños para que griten. Sin embargo, los niños son tóxicos para los monstruos, y después de que un niño…